Valencia es una ciudad que alberga muchísimos inquilinos y en ocasiones entendemos que puede llegar a ser complicado hacer que una casa se sienta hogar con las restricciones que supone no ser el propietario de la misma. Sin embargo, en Lauria a lo largo de los años hemos observado algunos patrones que hacen que las casas de alquiler sean más acogedoras sin necesidad de invertir demasiado ni de llamar a un decorador.
¡Te las contamos!